Gustavo Ariel “Megatrón” Corrado.

Buenas y santas, quería... ¿Cómo que "Corrado", si a mí me habían dicho que el apellido de este muchacho era Berna? ¡Es joda esto, así no se puede laburar! Seguramente fue el viejo de mierda de mi abuelo que lo hace a propósito para hacerme quedar mal. Ya le voy a envenenar la grapa uno de estos días.
En fin, el personaje que nos reúne hoy es ni nada más ni nada menos que Gusty, como se lo llama habitualmente. Permítanme que se los presente.

El por qué de su similitud con Megatrón, líder de los Decepticons, no está fundado en dicho liderazgo, ya que en La Máquina son todos igual de bobos y burros, sino que tiene que ver con esa picardía que lo hace sobresalir en cientos de jugadas y la cual la hace sumamente odioso ante los rivales, algunos de los cuales lo ven así:

y otros, segundos antes de huir despavoridos, lo ven más o menos así:

Lamentablemente, este muchacho tuvo un año muy complicado en lo que a lesiones se refiere, tuvo inconvenientes con un desgarro (no, ahí no, fue en la pierna), con la rodilla, con la ciática, con la artrosis, artritis, sistitis y otitis; algunos hasta hablan de hemorroides sangrantes, pero creemos que son rumores infundados. De todas formas investigaremos.
Con todo esto encima, tuvo que ser intervenido de suma urgencia en uno de los tratamientos más completos y complejos que existen en la medicina moderna. Justamente acá tenemos en exclusiva uno de los momentos claves del desarrollo de dicho tratamiento:

Pero finalmente, luego de tanto problema físico, el jugador está completamente recuperado y listo para volver a las canchas a demostrar todo lo que puede dar. ¿No es así, Gusty?

Muy bien, así te queremos ver.
Se trata de un goleador destacado, que no tiene inconvenientes de jugar en dos equipos al mismo tiempo y siempre plantar cara a cualquier rival que trate de quitarle el balón. También, con esa carita...

¿qué jugador no se sentiría intimidado? Yo no aguantaría la caca.
Así luce este jugador con la camiseta puesta cada vez que entra a la cancha:

y los rivales lo ven tranquilamente haciendo jueguito así:

pero se descuidan un momento y este muchacho "te abre los panes" y te la manda a guardar. Y después... ¿qué vas a hacer? ¿Le vas a protestar a la defensa? ¿Que por qué no lo marcaron? ¿Que por qué no se la sacaron? ¿Que cómo lo dejaron patear? Ya está, te la mandó a guardar y no te lo cose nadie.

Pilas, nene, que los goleadores no abundan y el equipo necesita ponerl... digo, hacer goles.

Con este perfil se cierra la fase Decepticon.